#Declaraciones de amores inadvertidos.

He pensado en mil y una formas de decirte esto. He pensado en cómo hacer para que no sonara a demasiado de repente. No lo sé. Seguramente después de estas líneas pierda todo, pero lo necesito. Necesito decirte que casi como si fuese de golpe has empezado a ser esa maldita razón de todo, ese puto único motivo. Realmente no lo sé. No sé si merece la pena escribirte todo esto, pero es que es demasiado y ya empezaba a ser cada vez más grande el dolor que se me hundía en costado si no te lo decía. Tenías que saberlo. Tenías que saber que todo, cada palabra de estas es demasiado. Y es demasiado lo que habita en mí, lo que forma parte de mí. No lo sé. Quizá ya te hayas cansado de todo esto, de estas frases que quizá te hayan jodido la noche. Puede ser. Lo siento.
{AlmostÉlah.}

#Para que te pierdas con él.

Recuerdo todo eso como si se tratase de ayer. Recuerdo como rutilaban sus ojos a la luz de la luna mientras prometía infinitos que quedaban remididos a nada. Recurerdo su forma de líar cada Virginia que nos fumamos y como me acabé volviendo adicta al humo de sus cigarros. Recuerdo haber olvidado toda esa mierda de saber aguantar, de historias de nadie, de lágrimas que llegaban a ser dulces si era él quien las secaba. Recuerdo esas cervezas, esas madrugadas suicidas, esas igneas caricias. Todo eso de que él podía llegar a ser ese puto único motivo de llegar a ser, era algo con lo que contaba cada vez que me llamaba “pequeña” y me hacía creer que podía brillar hasta en la sombra de su sonrisa. Lo que aún habita en mi de todo lo que me dio, es eso que me enseñó de saber tener el corazón de león y saber entender lo que esto significaba, intentó hacerme creer en mí y lo peor es que casi lo consigue.#
{AmostÉlah.}

#Saudade.

Historias utópicas que sólo pasan en mis sueños de alquiler. Faltas de inspiración. Olores que se asemejan a esa melancolía que llega y arrasa con ese único ápice de edén que aún habitaba en mí. Frases que se hacen distintas dependiendo de la voz que las haga cobrar vida. Latidos que suenan de forma parecida a una canción. Eso poco que queda de los atracos que le dimos a todo, porque por quedarnos no nos quedaron ni esas espesas mañanas de diciembre. Esas caricias que embelesan, que dan escalofríos, que arden. Saudade. Lágrimas ácidas que acompañan al amargo son que invade mi alma. Mi corazón embarrado para que mi igneo camino tuviera algo que ver con el gélido tuyo. Rendijas por las que se escapan sonrisas para dejar entrar el aire. Y será que descuido en cada paso en que tropiezo; dejadme el silencio.
{AlmostÉlah.}

#Delirios entre buchito y buchito.

Recuerdos con sabor a melancolía, a esa espesa esperanza que a veces se hace difícil de tragar. Canciones que parecen resucitar todo lo bueno que quedó atrás, todo eso imposible que se fue haciendo fácil a tu lado poco a poco. Esos párrafos escritos entre buchito y buchito a esas cervezas que saciaban mis ganas de mandarlo todo a la mierda. Nubes de tabaco de las que nacen miles de lágrimas, miles de historias que necesitan cobrar voz, miles de ganas por disfrutar cada suspiro. Pero todo parece distinto cada vez que tus ojos se hunden en los míos cada vez que me haces sentir que puedo brillar en la sombra de tu sonrisa. Y es curioso, pero hoy por hoy, el Rock n' Roll me sigue recordando un poco a ti.
{AmostÉlah.}

#Boli, papel y Sairway to Heaven de fondo.

Esas líneas en blanco que empiezan a cobrar vida a ritmo de un “Stairway to Heaven" utilizado como música de fondo. Noches en vela resucitando cada párrafo, cada sensación, cada tristeza. La forma de avanzar por los folios con esas faltas de ortografía, esa letra extraña que las hace tan personales, es lo que me obliga a necesitar todo esto. Esos colores, ese arte hecho con la palabra capaz de hacerme sentir lo que nunca antes había sentido, es algo increíble. Bueno, y esa maldita forma de dejarme la piel en cada párrafo que escribo, es algo con lo que ya cuento a estas alturas. Esos escritos que nacen entre nubes de tabaco o entre miles de botellas de cerveza vacías, suelen ser los mejores. Así, contados desde la rabia y la impotencia disfrazadas de lágrimas, o desde la misma tristeza que hacen de cada línea, la más sincera de todas. Esa forma de apaciguar el dolor interno que no se consigue de otra forma. Ese desahogo. Esas sonrisas escondidas entre líneas; esto sí que es vida...~
{AlmostÉlah.}

#Dreammer. (II)

Muertes por inanicción segundo tras segundo. Nanas de hambre. Caricias que no son más que puños bien cerrados. Falta de libertad, de fuerza, de sonrisas pintadas. Imposibles por alcanzar. Pasos dados a tientas, miedos colgados de los jirones de esas pesadillas que tienen como vida. Lágrimas ácidas como únicas acompañantes. Se le añaden traumas a este son con cada noticia más, con cada cifra aumentada. Guerras, sangre. Se me hunde el dolor en el costado cada vez que se narra cada caso similar. Y no hay nada capaz de extrangular aún más mis entrañas que el eco de esos llantos entrelazados ya con la muerte resonando en mi cabeza. Ese derroche de historias perdidas, de ojos cubiertos de tristeza, de malditas inseguridades. Y es curioso, pero el país que lucha por la paz mundial es el que más armas vende, ¿qué coño es esto?.
{AlmostÉlah.}

#Sext me!

¿Menos de tres?  Una gilipollez. Pégame. Hazme llegar a rozar el cielo. Es un drama quizá pegajoso lo que abarca este igneo camino. Ya sabes mi forma de utilizar las manos y de hacerte sentir que te estorba hasta la piel. Déjame usar la lengua para hacerte viajar al infinito en cuestión de minutos. Ponte sobre mi que ahora sería capaz de decirte que sí a todo. Eres mío y lo sabes. Quiero que me folles como nadie, quiero sentirte en mí. Quiéreme, ódiame pero sabes que aún así quieres follarme. Sé cuáles serán los recorridos de mi lengua en cada centímetro de tu piel, conozco las marcas que más de una vez dejé en tu cuello. Hazme mala, fuerte como la peor droga que jamás hayas probado; sé que quieres algo más.
{AlmostÉlah.}